Hay dos ventajas que todo empresario o emprendedor debe aprovechar: por un lado, la globalización, que nos ofrece disponer de millones de potenciales clientes a través de internet; por otro, nuestro idioma, que nos permite el acceso a la venta en muchos países sin el problema de la barrera del lenguaje.
Si además de lo anterior disponemos de un sin fin de herramientas para dar salida a nuestros productos, aprovechémonos.
Porque no nos engañemos: lo que todo negocio busca es vender y poco importa si esta venta se realiza en España, Chile, Alemania o Japón. El caso es ir generando negocio de una manera consolidada y de fácil gestión.